jueves, 6 de enero de 2011

INHUMANOS

CLÍNICA PRIVADA BOTA A PACIENTE A LA CALLE
* Trato inhumano de Hospital Juan Pablo II.

Personal de la clínica privada Juan Pablo II, ubicada en el distrito de La Victoria en Chiclayo, arrojó de sus instalaciones a uno de sus pacientes porque este se orinó en la cama.

Fue necesaria la presencia del representante de la Defensoría del Pueblo para que el enfermo sea nuevamente ingresado a las instalaciones del mencionado lugar.

Según los familiares de Jhon Galán Fiestas, el ingreso a la clínica se produjo debido a que este se sintió mal, pues padece de leucemia. "Mi hijo ha estado internado hace 2 meses en esta clínica porque le hace falta plaquetas, se recuperó y le dieron de alta, pero ayer volvió a recaer y lo conducimos de emergencia hasta este lugar. Él ingreso por el servicio de emergencia y allí ha estado siendo atendido; pero como se orinó en la cama, el médico Yuri Moya ordenó que lo sacaran a la calle", manifestó desconsolada la madre de Jhon, Betty Fiestas, quien con su hijo en brazos pidió que este sea atendido por los médicos.

Cuando aún el joven se encontraba tirado en plena avenida Grau, llegó el representante de la Defensoría del Pueblo, quien de inmediato se entrevistó con la madre del enfermo para conocer lo que había pasado.Minutos después se observó a personal de la clínica con una silla de ruedas y pasó al paciente a los interiores del lugar. Ninguno de los encargados del local de salud quiso dar información.

OPINIÓN DE LAMBAYEQUE ACTUAL
En LAMBAYEQUE ACTUAL no acostumbramos a informar o reproducir noticias trágicas o negativas, pero nos resulta trascendente difundir esta información, porque es absurdo que en nuestros tiempos, existan personas tratando a otras como si fueran trapos sucios.

¿Qué hace un médico lanzando a la calle a un paciente enfermo? ¿No juraron estos profesionales defender la salud y trabajar siempre en beneficio del ser humano? Esta actitud nos apena, nos indigna y nos obliga a hacer un llamado de atención a todos los que brindan un servicio de esta naturaleza, para que sean más tolerantes, sensibles y caritativos con los demás.

Nada justifica semejante reacción. Y menos considerando el tipo de servicio que brinda este centro de salud. ¿No es común que algunos pacientes miccionen en las camas? ¿Una clínica que pretende ser la mejor de la ciudad, no debería estar preparada para situaciones así?

Dios nos libre de caer en manos de un médico de ese tipo y de una clínica de esa calaña. Por nuestra parte, esperamos jamás tener que usar los servicios del Hospital Juan Pablo II.

1 comentario:

Anónimo dijo...

porque hace eso con la gente humilde,
yo lo concozco y es un despota espero que algun dia el muera como un perro maldito medico desgraciado